ORIGEN DE UN PAQUEO CUALQUIERA

     Había empezado a escribir sobre el stress de marzo y lo atareadísimos que se vuelven mis cortas semanitas. Luego me detuve a pensar que en verdad es demasiado barza escribir de eso, tomando en cuenta que en este momento tengo dos días libres a la semana, ya que aún no empieza ni mi práctica ni mi peguits en la PUC. Por lo tanto, no estoy estresada ni atareadísima (aún), estoy playa, como pocas veces en mi año, aún de vacaciones en marzo (en mi cabeza), así que no seré barza en esta oportunidad y dejaré ese post para cuando esté viviendo en carne propia ese duro panorama, como algunos de ustedes. Sorry, but not sorry.

                La idea de mi post de esta semana surgió ayer, mientras ordenaba mi dormitorio incesantemente con mucho anhelo (lee esto mamá). Gracias a esta cotidiana y habitual acción (es sabido) encontré un recuerdo escondido de mi maravilloso verano; un boletito de micro provinciana, la que tomé desde Valdivia a Futrono en mi viaje al sur de Chilito. Fue un trayecto corto, de una hora y un poco más, pero lo recuerdo bien, especialmente a mi compañero de asiento; el pobre Valdiviano que venía alado mientras yo dormía. Digo pobre, porque efectivamente él hubiera deseado que yo durmiera todo el viaje, pero para su desgracia desperté en los último 20 minutos, en el peor momento, en los precisos instantes de un paqueo evidenciado de forma suprema (seguramente ustedes han sido testigos de alguno de aquellos).

Estaba media dormida cuando empecé a escuchar que mi compa de asiento iba bien despierto; bien atento al teléfono, rindiendo informe, dando explicaciones. Él fue ese día un representante honorable del macabeo promedio, el que ejemplifica y se lleva el protagonismo del tema de hoy, los celos (palabra poco frecuente en mi vocabulario). Por suerte su minits no se alcanzaba escuchar(al parecer él la conocía bien, por lo que llevaba audífonos), pero por más que me giré hacia la ventana (haciéndome la loca) era inevitable imaginar lo que ella decía, se podía deducir con las respuestas apaciguadoras del sujeto custodiado; "si mi amor", " perdón, nunca más mi amor”, “no voy hablando con nadie amorcito”. Luego de que cortó la llamada, me quedó mirando, pero la verdad yo no quería respirar, ni pestañear, ni omitir palabra alguna. Me imaginé a su polola celópata, que quizás había puesto un micrófono o algún implemento de espionaje, que me llamaría y me diría voy a encontrarte (mucha “búsqueda implacable” en mi imaginación), así que me limité a una conversación que él llevó y me bajé de la micrito sin despedirme.


Aquí en Valdivia, antes de subir a la micrito hacia Futrono con mi compa paquea3

En ese momento no pensé nada, pero ayer, que encontré el boleto, me cuestioné la vida, más que en estas clases de filosofía empírica (estos post son mis apuntes). Pensé en ese pobre tipo y me pregunté si alguna vez yo había protagonizado una escenita así (los dejaré con la duda), como locately al otro lado del teléfono; cual  Angie Jibaja, o como víctima culpable, como ese sureño coqueto (que no se resistió a mis encantos y me habló, yiaaaa). Varios estarán pensando que sí, que soy experta en el tema, y que seguramente tengo postgrado en ser la bruja, pero nada que ver queridos amigos míos (no hay registros de aquello), me costó mucho pensar en cosas que me dieran celos. De hecho, tuve que hacer encuestas, buscar en recuerdos de facebook, preguntar a pololas de macabeos promedio (faltó mi cuñada), recurrir a #esdecelosa; estuve a punto de llamar a ese tipo de Valdivia y preguntarle qué eran los celos, él si era un protagonista experto, con doctorado en palabras apaciguadoras, escenitas y motivos.


Ejemplo de macabeo promedio, mi hermanito favorito



Después de la exhaustiva búsqueda en mi interior y exterior, en mis episodios más olvidados y mi maduración obligada, pude llegar a muchas conclusiones y acuerdos, pero antes de todo eso logré identificar los episodios típicos que más causan celos (no a mí, en general). No los celos de la canción de Fanny lu (cuando caminas con alguien, cuando te siento feliz, cuando respiras, etc etc), si no que aquellos que en verdad tienen al macabeo promedio dedicando Sorry. Aquí están los porqués de tanto paqueo telefónico, lo que seguramente condenó a mi compañero de mini viaje, lo que hace que las flores sigan siendo un negocio factible; las acciones y pretextos secretamente guardados en cada corazón celoso, los orígenes de un paqueo cualquiera (por lo que me han contado).

Amiguitas
Súper repetido, para nada secreto, las amiguitas siempre producen esa ciertas ganas de sacar la escopeta, pero ¿qué es las hace ser aborrecidas? Luego de muchas respuestas he llegado al corolario de que el problema no son las amiguitas ( porque no cualquier amiguita produce celos), si no que el problema en verdad son cierto tipo de amiguitas, las que cumplen con algunas características específicas. Son seres que usan sobrenombres cariñositos, suben fotitos con dedicatorias 1313 interpretativas, aconsejan en contra de la pareja y no desaprovechan oportunidad para demostrar que voluntariamente podrían ser un mejor partido (hay de aquellas, repudiadas en este universo). Esas criaturas son las enemigas de toda celosa, siempre estando involucradas en situaciones medias raras, aunque la mayoría de las veces es puro rollo de uno, no hay que creer todo lo que te vienen a contar https://www.youtube.com/watch?v=Bu9vsQcm-qE

Manitos
No sé ustedes, pero yo no soy fans de que me abracen mucho, ni me toquen la cintura (las veces que he tenido), ni me hagan cosquillas o cosas así. No porque sea el grinch del contacto físico, si no que porque pienso que para ello debe haber un grado de confianza específico; que no se logra con cualquier persona, ni en cualquier situación, ni bajo cualquier relación (alto ahí compa). Bajo este criterio es que podría explicarse el consenso recolectado de que ese tipo de jugueteo puede mal interpretarse cuando se lleva a cabo con varias personas en varios contextos (pasándose de listo), produciendo celos, paqueo, alerta, bla bla. En palabras más simples (y como pensaría mi amiga Angie del reality) mientras las manitos de tu pareja jugueteen lo menos posible cerca del cuerpo de otras, entonces el mundo se vuelve un lugar mejor. Sin tocar (manos atrás, cual pichanga) de lo contrario, arde Troya. Mejor  https://www.youtube.com/watch?v=otCpCn0l4Wo

Miraditas
¿Será que hay ojos mirones que acusan? Al parecer la carne es débil y ciertamente hay quienes se adhieren mucho a lo de “tres veces es pecado” (aprovechando al máximo sus dos miradas antes de caer en condenación).  Esos ojos son los que provocan una que otra peleíta, por mirar con deseo lo que no se tiene o con pena lo que si se tiene (no sé cuál de las dos es peor). Me pasó una vez que me encontraba con alguien que miró tan descaradamente una minits que iba pasando atrás, que me dieron hasta ganas de girarme a mí, sus ojos abandonaron sus cuencas y me hicieron pensar en esta descripción https://www.youtube.com/watch?v=0NX9WLjVgac (realmente debió haber sido una minaza). Hay miradas y miradas, hay minazas y minazas, cosas que merecen ser miradas más de tres veces, pero definitivamente en algo estamos de acuerdo; mirar no es infamia, mientras no signifique infamar a quien llevas de la mano (para pensarlo).

Cuentitos
Cada quien ha tenido sus amoríos o conquistas (#pasadopisado), pero esos cuentitos pasados pueden producir uno que otro paqueo cuando no están del todo enterrados. Hay quienes dicen que es imposible ser amigo de tu ex o que donde hubo fuego cenizas quedan, lo cierto es que la idea de las conquistas pasadas es que se resguarden como conquistas pasadas (criterio no apto para rememberss), con mayor énfasis cuando hay una conquista en presente. Significando esto que lo que pasó pasó, por lo que no debiera existir  paqueo por personas a las que se les ha dicho next. Generalmente los celos vienen cuando esas resoluciones de ay nuestro amor se acabó en verdad no han sido resueltas del todo, o se han omitido cosas importantes, encendidas por mal intencionados comentarios. Solo puedo decir que, si hay celos en su relación por este motivo, no dedique sorry, le vendría mejor un https://www.youtube.com/watch?v=_72RmSMPd5s

Según mi investigación (verídica) hay tantas tantas cosas que dan celos en este mundo, que no terminaría nunca de describirlas. Pero lo mencionado constituye la base general en las que otras cosas se sitúan para causar paqueos constantes en las parejas felices del planeta tierra; dígase casados, novios, pololos, andantes, amigos con ventaja, sin nombre, sin concretar, amores de verano, etc etc. Además cabe destacar que las redes sociales como el Facebook y el whatssap alimentan inmediblemente las peleas por celos, ya que mediante los vistos (o  la última hora de conexión) y los infortunados likes (me encanta a Maluma o Denisse Rosenthal) hay muchos que han salido perjudicados, sin dejar de mencionar los psicopateos pela3 que  son descubiertos por la pareja y pueden provocar una explosión nuclear (casos en que el patrón del celu no ha salvado).

Luego de este recorrido y de las escasas experiencias de celos en mi vida he llegado a la conclusión de que efectivamente toda situación se justifica y contextualiza bajo criterios distintos, personas distintas, situaciones distintas, por lo que los celos son o no son pertinentes de acuerdo a tu propia realidad en particular. Sin embargo, como concepto general la mayoría de las veces se originan en la inseguridad, no tanto inseguridad en lo que eres, si no que inseguridad en el tipo de relación que llevas con la otra persona. Queriendo decir que es muy modificable el nivel de celopatía que tenga tu relación (y yo no nací sabiendo esto), solo basta en revisar, reformular y fortificar los aspectos que estén produciendo inseguridades, con la intención de eliminar celos innecesarios que arruinen la paz y felicidad del Love, así de izi. Lo bueno de todos los episodios celópatas del mundo, es que así como de cada situación, de ellos también se aprende. El pobre tipo Valdiviano aprenderá algo, no bajo cada paqueo y ramo de flores, si no que bajo las modificaciones que él y su polola bruja del teléfono vayan haciendo en su amor sureño.

Yo he aprendido a ser menos celosa con el tiempo, más segura, más pacificadora, menos bruja, menos enana. Este meme me representa cada vez menos. 

A pesar de esto, no puedo negar que hay algo en mí que me hace pensar que hay algunas bromas celosas que son encantadoras, cuando se utilizan con humor, cuando son motivo de risa y coqueteo, cuando no significan verdaderamente una pelea, cuando llegan a la resolución de que en medio de amiguitas, manitos, miraditas y cuentitos existe una búsqueda del tesoro encontrada. Antes de que reafirmen que soy una bruja celópata, cabe recordar que las opiniones vertidas en este post han sido recogidas de distintas fuentes y no representan necesariamente la total subjetividad del emisor. En otras palabras, no todo lo mencionado aquí es lo que a mí me causa celos, puede ser menos o puede ser más, tal secreto solo puede saberlo quien provoca tal cosa, tsssssssssssssssssssssorry.

CUANDO ME DEDIQUEN ESTA CANCIÓN, SABRÉ QUE HE SUPERADO TOTALMENTE LOS CELOS, ES MI ASPIRACIÓN, UN MODELO DE VIDA



PD: LOS CELOS DE LOS HOMBRES TIENEN SUS MINÚSCULAS DIFERENCIAS, SE VIENEN EN UN FUTURO

S A L U 2

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